Florian Tudor, también conocido como el Tiburón, es un criminal de Craiova (Rumania) y el jefe de la banda de la Riviera Maya. Según la policía rumana, en 2012 estaba en México coordinando el tráfico de personas de Rumania a Estados Unidos a través de territorio mexicano. Dos años después, él y su grupo montaron una sofisticada trama para clonar tarjetas bancarias en cajeros automáticos en zonas de gran afluencia turística de México. La operación generó ganancias de hasta 240 millones de dólares al año. En enero pasado, Tudor fue oficialmente acusado en Rumania de establecer una organización criminal, además de por extorsión y por conspiración para cometer un homicidio. En México aún camina libremente.