Empresario domiciliado en Texas cuyas empresas figuraban, al parecer, entre los contratistas más importantes de la petrolera estatal venezolana PDVSA. Él y su socio comercial, Abraham José Shiera Bastidas, admitieron posteriormente haber sobornado a funcionarios para ganar licitaciones amañadas para proyectos de PDVSA.
Tras su detención en 2015, cuatro de sus cuentas en Credit Suisse permanecieron abiertas. Compartió algunas de las cuentas con su hijo José, que fue detenido tres años después en España en 2018 acusado de haber blanqueado parte de la fortuna ilícita de su padre a través de ese país, según medios de comunicación.